La mentoplastia es una técnica quirúrgica relativamente común que consiste en modificar el mentón o la barbilla para buscar una mayor armonía con el resto de las proporciones faciales. Esta modificación puede consistir en modificar su posición (desviación o asimetría), aportar volumen (hipoplastia), reducirlo (hiperproyección) o cambiar la forma.

La posición del mentón como zona de transición entre la cara y el cuello hace que adquiera una gran relevancia en la armonía facial. Fundamentalmente el mentón se observa desde dos proyecciones: vista frontal y vista lateral (perfil). Las consultas más frecuentes suelen ser porque en la vista frontal se ven el mentón corto y en la vista lateral muy retraído.

El aumento de mentón, tanto de forma como de proyección, se realiza para definir más su forma, potenciar el perfil y armonizar los rasgos faciales (mejora la línea estética mandibular). Existen diversas técnicas para llevar a cabo el aumento del mentón que van desde sustancias de relleno como el ácido hialurónico o lipofilling graso hasta las prótesis de mentón o la cirugía de avance (genioplastia). Cada técnica tiene una indicación determinada por lo que es fundamental una valoración previa del caso.

La disminución del tamaño del mentón y/o de la proyección se realiza disminuyendo el tamaño del maxilar inferior (hueso del mentón) mediante el limado del mismo u osteotomías correctoras. El objetivo es armonizar el óvalo facial.

Si te has planteado en algún momento una mentoplastia y tienes dudas de qué procedimiento es el más adecuado para ti pide cita con nosotros para aconsejarte. Es muy importante ponerse en manos de profesionales cualificados y con experiencia para asesorarte en el proceso. El Doctor Robustillo estará encantado de atenderte y valorar tu caso.